El Siglo de Oro es la corriente literaria más importante que se ha desarrollado en España y, además, la responsable directa de que el idioma español alcanzara su máximo nivel de expresividad. Como si todo eso no bastara, durante ella surgieron algunos textos clave de la literatura universal, entre ellos el Quijote.
Por esa y muchas otras razones, es necesario que nos detengamos a conocer esta corriente tan especial, que es justamente lo que haremos hoy. En este post te brindaremos la definición del Siglo de Oro, sus características y sus autores principales. ¡Presta atención a cada punto y serás un experto en el tema!
¿Qué es el Siglo de Oro?
Si nos fijamos en eso último, podemos ver que hablamos de un período de dos siglos. En realidad, no es tan exacto, aunque sí abarca más de los 100 años que dura un siglo común y corriente.
Esto, como se puede esperar, genera mucha confusión. Simplemente, se ha usado el término “siglo” para referirse a la etapa completa sin que involucre el tiempo estimado por dicha palabra.
En cuanto a los puntos de inicio y de final, existe aún mucha discusión entre los expertos. Sin embargo, la mayoría de ellos está de acuerdo en establecer dos años concretos:
- 1492: en este año Antonio de Nebrija publica su Gramática Castellana, el primer tratado o manual acerca de la gramática de nuestro idioma.
- 1681: fue el año en el que murió el dramaturgo Calderón de la Barca, quien fue el último representante de todo el Siglo de Oro.
¿Por qué se llama Siglo de Oro?
Recordemos que el oro es un elemento que vale muchísimo. De esa forma, se vuelve un complemento perfecto para indicar que algo es de una calidad elevada.
Precisamente eso pasó durante el período entre 1492 y 1681. En el caso de la literatura, aparecieron autores que consagraron el español como lo hicieron los poetas romanos con el latín más de un milenio antes.
En consecuencia, la partícula “de Oro” se vuelve una metáfora al añadirla con el sustantivo “Siglo”, y deja muy en claro que se habla de una época en la cual el arte tuvo un esplendor incomparable.
Historia del Siglo de Oro
La historia de esta corriente literaria comienza, como ya vimos más arriba, en 1492. Este fue un año de muchos eventos históricos, pero el que más nos importa para el tema de hoy es la aparición de la Gramática castellana.
La publicación de un manual así establecía formalmente el idioma, es decir, le daba una base sólida.
Recordemos que el español se derivó del latín y había estado constituyéndose por siglos. Lo que logró Antonio de Nebrija fue consolidarlo al ser capaz de explicar las reglas de su uso y de su funcionamiento.
Ese contexto de consagración del español fue vital para que los autores españoles se fijaran en su propio idioma y en las capacidades expresivas que poseía. Así, figuras como Lope de Vega y Luis de Góngora empezaron a experimentar con el español.Muchos otros escritores se sumaron a ello, cada uno desde una perspectiva y un género literario diferentes. En este proceso fueron saliendo a la luz varias obras de la máxima categoría. Resultaba sorprendente que hubiese tantos genios a la vez.
Para cuando Calderón de la Barca murió, el teatro, la poesía y la novela habían sufrido una renovación absoluta. Los autores españoles pasaron a ser un ejemplo a seguir para los demás europeos y para las generaciones futuras.
Movimientos del Siglo de Oro
El Siglo de Oro, al ser una etapa tan amplia, englobó a la vez varios estilos o movimientos literarios. En resumidas cuentas, cada uno de ellos proponía una forma de composición y un lenguaje distintos.
Entre tantos estilos, hubo dos que se desarrollaron en la poesía y que influyeron en autores de los siglos recientes: el conceptismo y el culteranismo.
Conceptismo
Este movimiento se centraba en el concepto. Lo que se buscaba era plantear la mayor cantidad de ideas sin usar demasiadas palabras.
Dicho de otra manera, el conceptismo se enfocaba primordialmente en el fondo de la obra. La relación entre los términos y su capacidad para significar más de una cosa al mismo tiempo eran el recurso del que se valían los poetas para armar sus textos.
A partir de ello, se fueron desarrollando otras herramientas del lenguaje que servían para lograr una mayor expresividad: los juegos de palabras, la ironía, las paradojas, etc.
Este movimiento del Siglo de Oro tuvo varios representantes, pero el más característico es Francisco de Quevedo, quien se hizo famoso por su uso de las palabras polisémicas (aquellas que pueden tener múltiples significados que no se relacionan).
Culteranismo
El culteranismo fue un movimiento literario que se caracterizó por enfocarse en el uso de palabras cultas, neologismos (nuevos términos) y una gramática compleja.
Todo eso, en conjunto, hacía que los poemas culteranos fuesen particularmente complejos. Por ejemplo, las palabras cultas solían venir del latín, y solían pasar desapercibidas para quienes no contaban con una notable formación académica.
Al mismo tiempo, los autores jugaban muchísimo con el orden de las palabras. Las reorganizaban de una manera que parecía casi antinatural, tomando como base la gramática del latín. Este rasgo ha llevado a plantear que el culteranismo se enfocaba principalmente en la forma del poema.
Entre los exponentes del culteranismo, es Luis de Góngora el más resaltante. Tanta fue la importancia de este escritor que el movimiento se conoce también como “gongorismo”, en referencia a su apellido.
Características del Siglo de Oro
Las características del Siglo de Oro representan un caso especial, pues no se aplican en igual medida para todos los movimientos que conforman esta corriente. Algunas están muy presentes en unos, mientras que en otros se notan menos:
El teatro como elemento predominante
En el Siglo de Oro el teatro cobró la máxima importancia. Esto se debió a factores que se salen de lo literario, como el propio gusto de la población por las representaciones dramáticas.
Ese interés representaba una amplia fuente de ingresos, motivo por el cual escribir para el teatro brindaba una mayor garantía de tener éxito económico. Esto inclinó a muchos autores hacia el mundo teatral, y varios de ellos acabaron siendo leyendas de la literatura universal.
Teniendo todo eso en cuenta, se entiende perfectamente que una gran parte de la producción literaria fuese de tipo dramático. No significa que no hubiese poesía o narrativa, sino que las obras teatrales fueron las más protagónicas.
Utilización preferente del verso
Los autores del Siglo de Oro retomaron un rasgo que había tenido bastante peso en la Antigüedad: el uso preferente del verso. La forma versificada era para ellos más bella y les permitía aplicar mejores recursos técnicos.
Por ende, en el teatro y la poesía se empleaba comúnmente el verso. La prosa, en cambio, se usaba en ensayos y textos narrativos.
Esta nueva predominancia del verso contribuyó a establecer el valor expresivo del idioma español. Para entender de qué forma lo hizo, debemos fijarnos en tres hechos:
- El alterar el orden natural de las palabras comprobó que el español, tal como el latín, tiene una sintaxis muy flexible, lo cual permite plantear una misma oración de varias formas.
- El juego con las ideas y los conceptos que propuso el conceptismo sirvió para ampliar los significados de las palabras españolas y para demostrar que podían adquirir otro sentido en función del contexto.
- Los términos en latín que se usaban en el culteranismo se fueron integrando en el idioma hasta el punto de que algunos de ellos se adaptaron a la ortografía de la lengua española. Esto supuso un crecimiento de nuestro vocabulario.
Fue así como la predominancia del verso, más que un retroceso, significó una etapa de perfeccionamiento del español en la que dicho idioma alcanzó la riqueza expresiva de la que goza hoy en día.
Búsqueda de modelos literarios propios
Los autores del Siglo de Oro recibieron mucha influencia cultural externa; especialmente, la grecolatina. Ahora bien, para ellos era fundamental dedicarse a la creación de modelos literarios propios.
Ese es el detalle que los hace destacar dentro del Renacimiento, que todavía no se había acabado. Los españoles no querían imitar las fuentes clásicas, sino tomar ejemplo de ellas para ser capaces de establecer una literatura española bien definida.
En ese sentido, fueron muchos los autores que se dedicaron a crear manuales sobre cómo componer.
El caso más conocido quizá sea el Arte nuevo de hacer comedias en este tiempo, escrito por Lope de Vega. En dicho texto, Lope reflexiona acerca de cómo se debía elaborar el teatro en función del subgénero y tomando en cuenta el gusto de su época (siglo XVI).
De la misma forma, otros escritores explicaban cómo componer un soneto. En un todo, el propósito que perseguían era demostrar que la literatura española podía encontrar su propio camino creativo.
Patriotismo y religión
Esta última característica debe entenderse en el contexto de la época. Durante el Siglo de Oro, además del esplendor artístico, en España se dio un florecimiento político y militar.
Ese elemento impulsó el patriotismo de sus habitantes. Resultaba lógico, ya que, al vivir en un país que era una potencia en todos los sentidos, la nacionalidad española pasaba a ser algo valioso y hasta envidiable.
Por otro lado, la religión católica estaba más fuerte que nunca. Pese a que en otras partes de Europa había más discusión sobre el tema religioso, la nación española mantenía su catolicismo de siempre.
Ambos aspectos, patriotismo y religión, están muy presentes en los textos de esta corriente literaria. No disminuyen en ninguna medida su valor; por el contrario, sirven para entender la forma de pensar de los autores y de los personajes.
Temas del Siglo de Oro
Los temas del Siglo de Oro se vieron influenciados por la situación de España —que para entonces gozaba de mucho poder— y por la cultura de su población. De esa manera, podemos hablar de cuatro en específico:
La cotidianidad
La vida cotidiana es uno de los temas principales en las obras del Siglo de Oro. Este fue un cambio notable, porque, tradicionalmente, la literatura había rechazado casi siempre esa temática por considerarla indigna.
Pero los escritores españoles tenían otra perspectiva. No les parecía que la cotidianidad fuese un elemento inmoral o de baja clase, sino una realidad palpable de la que se podían extraer muchas cosas.
De ello se desprende que muchas de las tramas ocurran en lugares y con personajes que no eran comunes en corrientes anteriores, lo cual permitía que los espectadores se sintieran mucho más identificados con lo que veían.
El honor
El honor es otro tema que encontraremos en muchos textos de esta etapa literaria. Está directamente ligado a la moral social de ese entonces, según la cual era mucho más valiosa una persona honorable y honrada.
En general, los autores abordaban esta temática desde la perspectiva familiar.
La reputación de una familia en concreto era el punto de partida. Los autores jugaban con las acciones de sus miembros y cómo las mismas afectaban el buen apellido de todos. Así, se esperaba de ellos una conducta intachable.
Esta temática, más que solo una fuente de creación, servía para reforzar los valores de la época, sin llegar al adoctrinamiento que había en la Edad Media.
El existencialismo
Aunque no fue una regla en todos los autores, los cuestionamientos existencialistas aparecen de vez en cuando en los textos del Siglo de Oro. Estamos hablando de preguntas acerca de la realidad, del motivo de la existencia e incluso del destino.
Para abordar esos temas, algunos escritores utilizaban el sueño como recurso; otros preferían la locura.
Fuera cual fuera, el cuestionamiento suele ser bastante profundo, lo que plantea una necesidad de entender el sentido completo de la obra para poder asimilarlo. A la vez, este detalle enriquece el texto al darle muchas interpretaciones posibles.
Las tradiciones y costumbres
Las tradiciones y las costumbres de España son una temática recurrente, y aún más si estamos hablando de teatro. Sin embargo, no se trata de reflejarlas en los textos, sino casi siempre de hacer crítica a través de ellas.
La idea de los autores era utilizar ambas para profundizar en algún aspecto o elemento con el que estaban en contra. El ataque no iba tanto a la tradición en sí, sino a la moralidad de quienes la seguían.
Así pues, aunque se hiciera burla o sátira de las costumbres, en realidad el objetivo central era la sociedad que está detrás de ellas. Una sociedad muchas veces hipócrita que defendía unos valores, pero practicaba otros.Géneros del Siglo de Oro
En cada corriente literaria ha habido géneros que tienen mayor difusión. Si hablamos del Siglo de Oro, hubo cierta variedad, pero los más relevantes pertenecían al teatro:
Novela picaresca
La novela picaresca se llama así porque se centra en el pícaro, un personaje con mucha astucia y habilidad que suele ser de la clase baja. Por su situación económica, está condenado a utilizar la estafa para sobrevivir.
Este género buscaba ser una oposición a las novelas que idealizaban la realidad, en las cuales no había injusticias sociales y todos los personajes poseía una moral intachable. En ellas los protagonistas eran heroicos y se movían por motivos justos.
Ante eso, los autores de novelas picarescas plantearon personajes mucho más realistas y sin posibilidades de ascender en la escala social. No lo hacían para justificar sus maldades, sino para demostrar la gran hipocresía que abundaba en la España del Siglo de Oro.
Sátira
El caso de la sátira es muy especial, porque este género se desarrolló en teatro, en poesía y en narrativa. En consecuencia, fue el más flexible de todos los que aparecieron en el Siglo de Oro.
La sátira se caracteriza por ser una burla y una crítica a la vez.
Básicamente, los autores toman el conjunto de valores o costumbres que buscan cuestionar, y arman un texto que refleja todo lo negativo de ellos. Al hacerlo, procuran usar un tono irónico o sarcástico.
La estructura y el estilo de la sátira le permitía al escritor manifestarse en contra de lo que él desaprobaba, pero de una forma indirecta y mucho más artística.
Comedia
La comedia se caracterizaba por su tono alegre y festivo. Era el género teatral en el que los autores aprovechaban para hacer burla de muchas cosas, sin que fuese una crítica realmente dura.
Por otro lado, las comedias eran las que más frecuentemente se enfocaban en la cotidianidad. La vida diaria contenía sucesos graciosos de los que podían partir los escritores para elaborar múltiples argumentos.
Poesía mística
La poesía mística fue un género poético que vivió su máximo esplendor durante el Siglo de Oro. Su nombre se debe al hecho de que el tema central eran la religiosidad de la persona y su unión con Dios.
El poeta se detiene a reflexionar sobre su llamado religioso y la comunión personal con la deidad.
Considerando eso, es evidente que este tipo de poesía se aleja bastante de lo terrenal o cotidiano, para centrarse en lo espiritual. A través de ello, el autor puede conocer muchas cosas que Dios le revela y que no pueden ser percibidas mediante los sentidos.
Autores y obras del Siglo de Oro
En el Siglo de Oro hubo muchísimos escritores de alto nivel. Sin embargo, para que el listado no sea tan largo, vamos a centrarnos en los que más influencia siguen teniendo en los tiempos actuales:
Miguel de Cervantes
Miguel de Cervantes es por mucho el máximo exponente del Siglo de Oro, además del escritor español por excelencia. Nació en 1547 y murió en 1616, por lo que vivió un total de 69 años, tiempo suficiente para crear obras maestras de valor inalcanzable.A diferencia de lo que muchos piensan, Cervantes no tuvo una vida sencilla. Su talento e ingenio no le bastaron para establecerse económicamente, ni mucho menos para ganarse el respeto de sus contemporáneos.
Como muchos otros de su época, Miguel de Cervantes se dedicó al ejercicio de las armas. Su etapa como militar empezó aproximadamente en 1569 y terminó poco después de la batalla de Lepanto (1571). De esta última salió herido en la mano izquierda, que dejó de funcionarle.
Posteriormente fue capturado por piratas turcos cuando regresaba a España. Años después fue liberado, aunque esta etapa fue vital para forjar su carácter como escritor; asimismo, le sirvió para incluirla en algunos de sus textos.
Quizás el máximo encanto de Cervantes era su consciencia acerca del oficio del escritor y de la literatura en sí.
Sobre ambos temas reflexionó en más de una ocasión. De hecho, en buena medida sus obras son una puesta en práctica de las ideas que defendía. Como buen ejemplo tenemos las dos más conocidas:
- Don Quijote de la Mancha: se le considera la novela más importante de todos los tiempos. Protagonizada por don Quijote y Sancho Panza, fue compuesta para hacer burla de las novelas de caballería, en las que se idealizaba todo; sin embargo, más que solamente eso, acabó convirtiéndose en una historia que refleja la lucha entre lo que es el mundo real y lo que el ser humano desearía que fuera.
- Novelas ejemplares: se trata de un conjunto de novelas cortas que buscan reflejar la moral correcta de la época. Cervantes tomó inspiración en los modelos italianos, aunque fue capaz de añadirles su toque personal. A pesar de que cada una tiene su propia historia y argumento, es posible agruparlas entre las que son realistas y las que presentan un tono más idealizado.
Lope de Vega
Lope de Vega (1562 – 1635) es considerado el dramaturgo más representativo del Siglo de Oro. Se le llama también “Fénix de los Ingenios”, debido a que compuso muchísimas obras; aunque en su momento se le atribuyeron más de las que realmente había escrito.
La vida personal de este autor fue caótica; principalmente, por sus relaciones amorosas. Además de casarse varias veces, sostuvo relaciones de manera ilícita con varias mujeres y llegó incluso a raptar a varias. Esto siguió siendo así aun después de hacerse sacerdote.
Lope no se conformó con cultivar un solo género literario: los probó todos.
En la novela se dedicó mayormente al mundo pastoril. Como poeta fue capaz de recibir la influencia de los movimientos literarios de su tiempo y de la poesía popular, y casi siempre trató temas mitológicos o relacionados con la guerra.
Ya en el género dramático, que fue en el que verdaderamente brilló, encontramos que logró renovar el teatro. Además de componer el Arte nuevo de hacer comedias en este tiempo, teorizó mucho sobre cómo hacer dramas y lo ejemplificó con sus propias obras.
En cuanto a la temática, Lope solía recurrir frecuentemente al honor familiar y a los conflictos amorosos; pero se sabe que trató muchos más asuntos. Uno de ellos fue el abuso por parte de ciertas figuras políticas.Todo lo anterior ya deja claro que la bibliografía de Lope de Vega es tal vez la más extensa de todo el Siglo de Oro. Eso dificulta hacer una selección de sus textos, pero lo intentaremos:
- Fuenteovejuna: este drama, posiblemente el más famoso de Lope, se basa en un hecho real. La historia se centra en los habitantes de Fuenteovejuna, que deciden revelarse contra el Comendador Mayor debido a que este abusa de su poder. La obra refleja el poder de la unión colectiva como la solución a la falta de justicia.
- La dama boba: se trata de una comedia protagonizada por dos hermanas, Finea y Nise, quienes sufren el machismo del siglo XVI. Cada una de ellas se enfrenta a él de una manera distinta. En el caso de Finea, que es la verdadera protagonista, decide hacerse la tonta para pasar desapercibida; más adelante, cuando conoce el amor, se despierta su inteligencia.
- La Arcadia: es una comedia que parte de figuras de la vida real, pero Lope los plantea con nombres falsos. Los protagonistas son dos jóvenes enamorados, Anfriso y Belisarda. Esta última es alejada de él por sus padres, que no están de acuerdo con el romance. Posteriormente, por un conflicto de celos y falta de comunicación, ambos acaban estando con otras personas.
- La Dorotea: es un texto narrativo cuya característica principal es que se desarrolla a través de diálogos. Es decir, no hay una narración directa, sino que la historia avanza mediante las conversaciones de los personajes. La obra, dividida en cinco actos, tiene como protagonista a Dorotea y su drama amoroso con dos hombres, Fernando y don Bela. Al final de la historia acaba sola y en un convento.
- Jerusalén conquistada: es un extenso poema que se basa en una obra del mismo nombre compuesta por Torcuato Tasso unos años antes. El argumento se centra en la Tercera Cruzada; en esta se buscaba liberar la Tierra Santa, que hasta entonces permanecía en poder de los otomanos. Lo que hace Lope para diferenciar su texto es incluir la fuerza militar española.
Francisco de Quevedo
Francisco de Quevedo fue, además de la máxima figura del conceptismo, uno de los más grandes poetas en la historia de España. Vivió entre 1580 y 1645, y desde pequeño disfrutó de una situación económica bastante estable.
Siendo todavía un niño, se relacionó mucho con el mundo político debido a los altos cargos de su padre. Su formación empezó en un colegio de jesuitas y continuó en dos universidades: la de Valladolid y la de Alcalá de Henares.
Quevedo inició su carrera literaria cuando era joven, y eligió la poesía.
Ese fue siempre su género predilecto, aunque cultivó también la narrativa y el ensayo filosófico. Puede decirse que en todos alcanzó un buen nivel de éxito, por lo que fue uno de los pocos autores que triunfaron en vida y no de forma póstuma.
Entre los temas más recurrentes de Francisco de Quevedo están el tiempo y la muerte. Ambos los afronta desde una postura reflexiva y con una desilusión notable. Asimismo, utiliza un lenguaje rico en imágenes pero a la vez directo, esto es, sin adornos que representen un peso innecesario al ritmo del texto.
Es fácil deducir que Quevedo compuso un buen número de obras. Resulta sorprendente si se toma en cuenta que su vida estuvo llena de ocupaciones, casi siempre de carácter político. Sea como sea, los siguientes textos son los que mejor reflejan su estilo literario:
- El Parnaso español: es una amplia colección poética que incluye muchos de los mejores poemas escritos por Quevedo. Ha sido reeditado en más de una ocasión, y refleja una gran variedad temática. Algunos estudiosos señalan que el editor original contó con la asesoría del autor al momento de ordenar y clasificar los textos incluidos.
- Sueños y discursos: más que un texto literario, es realmente una obra filosófica dividida en cinco partes. Se considera que es la más compleja de todas las que llegó a escribir Quevedo, por las alegorías y los juegos incluidos en ella. Cada parte tiene una temática y una estructura diferentes, aunque todas intentan ser una crítica hacia algún aspecto de la realidad vivida por el autor.
- La vida del Buscón: es una novela picaresca que publicó Quevedo en 1626. En contraste con otras obras similares del Siglo de Oro, su fin principal no es adoctrinar, sino hacer reír al lector mediante las situaciones en las que se ve envuelto el protagonista. La crítica especializada ha señalado que este texto refleja la eterna oposición entre la clase alta y la baja, resaltando el deseo de esta última por ascender en el rango social.
- La cuna y la sepultura: es otro de los tratados filosóficos que hizo Quevedo y uno en el que se evidencia con mucha claridad su forma de pensar. El escritor se detiene a tratar de nuevo la muerte junto a otros temas, como la sabiduría, la esclavitud y la vida cristiana. Este fue uno de los textos más exitosos que publicó el poeta, ya que antes de su muerte había sido reeditado varias veces, y lo siguió siendo luego de que falleciera.
Calderón de la Barca
Pedro Calderón de la Barca fue otro de los grandes dramaturgos que aparecieron durante el Siglo de Oro. Igualmente, estuvo entre los más longevos, pues nació en el año 1600 y murió en 1681.
La vida académica de Calderón se desarrolló primero en un colegio jesuita y luego en dos universidades prestigiosas. Originalmente, escogió la carrera religiosa, pero decidió abandonarla. Unos años después, comenzó su carrera como dramaturgo.
Calderón de la Barca se vio influenciado por las obras de Lope de Vega, de quien tomó muchas ideas sobre cómo componer dramas.
Sin embargo, Calderón demostró una maestría técnica superior a la del Fénix. Esto se puede apreciar primordialmente en la riqueza de su lenguaje. No usaba tantos personajes como Lope, mas sí lograba hacer que cada uno tuviese un rol bien definido.
El teatro de este autor se destacó también por la escenografía. Para él, la decoración y el ambiente jugaban un papel fundamental en la escenificación, motivo por el cual los tomaba en cuenta a la hora de componer.
Hablando ya de las obras en sí, el propio Calderón de la Barca aseguraba haber escrito más de cien piezas dramáticas; no todas del mismo subgénero, obviamente. En ese listado debemos destacar cuatro:
- La vida es sueño: es la obra cumbre de Calderón. Se centra en Segismundo, un príncipe que ha sido encerrado por su propio padre, el rey Basilio, debido a una profecía en la que se anuncia que Segismundo le quitará el trono. Partiendo de este argumento, la obra reflexiona sobre la voluntad que tiene el ser humano y su libre elección para elegir qué hacer en la vida, en oposición a la idea de un destino que dirige la vida de todos.
- El alcalde de Zalamea: este drama gira en torno a Pedro Crespo, un labrador rico que cuenta con una moral intachable. Su hija, Isabel, es secuestrada y abusada por el capitán Álvaro Ataide. Esta ofensa ocasiona que Crespo busque justicia; y gracias a que es nombrado alcalde, logra encarcelarlo por el crimen cometido.
- El mayor monstruo, los celos: en esta obra el argumento se desprende de un texto del autor romano Flavio Josefo llamado Guerra de los judíos. La protagonista es Mariene, la esposa de Herodes. Ella recibe una profecía que indica que su esposo dará muerte a lo que más ama, aunque él no se lo cree. La historia está llena de fatalidad, y es un reflejo del peligro de las pasiones humanas.
- El médico de su honra: este drama está protagonizado por don Gutierre, quien sospecha que su esposa le ha sido infiel con el hermano del rey. Temiendo que la sociedad se entere del hecho y su honor personal se vea afectado, elabora un plan para acabar con ella. Finalmente, tras llevar a cabo su asesinato, logra contraer matrimonio con otra mujer, sin pagar por la muerte de la otra.
Luis de Góngora
Vivió entre 1561 y 1627. Durante ese tiempo se ganó, además de cierta fama como poeta culto y del máximo nivel, un buen número de rivales y enemigos.
Este escritor tuvo la buena suerte de nacer en una familia bien posicionada, gracias a lo cual disfrutó de una excelente educación. Sin embargo, a partir de 1603 debió enfrentar una dura etapa de problemas económicos que nunca logró resolver.
Si bien en la actualidad Góngora es tan conocido como los demás integrantes del Siglo de Oro, durante su vida no publicó tantos textos como se esperaría. No obstante, sus obras ganaron una mucha difusión en poco tiempo, con lo cual se dio a conocer entre sus contemporáneos.Los críticos consideran dos etapas en la producción de Luis de Góngora:
- En la primera su estilo era ligero y no incluía demasiados adornos.
- En la segunda desarrolló una escritura mucho más rebuscada y con todos los rasgos que lo hicieron ser el centro del movimiento culteranista.
Dentro de la bibliografía de este autor podemos encontrar poemas cortos y extensos. Estos últimos son los que mayor trascendencia han tenido, hasta el punto de ser el objeto de estudio de bastantes escritores famosos del siglo XX:
- Soledades: es de lejos el texto poético más representativo de Luis de Góngora, aunque nunca fue completado. El protagonista es un joven naufrago que llega a una isla. A través de las vivencias y los sucesos que ocurren a su alrededor, el poeta desarrolla una serie de cuestionamientos y reflexiones. Esta obra fue duramente criticada en su momento debido a las múltiples referencias mitológicas y al lenguaje rebuscado, los cuales complican la lectura.
- Fábula de Píramo y Tisbe: es otro poema extenso, quizás aún más complejo que las Soledades. La trama se inspira en una que creó el poeta romano Ovidio sobre dos jóvenes enamorados. El argumento se ve acompañado de incontables referencias, costumbres, formas de hablar y estilos literarios distintos. Se estima que el propio Góngora consideraba esta como su obra maestra.
- Fábula de Polifemo y Galatea: aquí el escritor toma de nuevo inspiración en un mito desarrollado por Ovidio en sus Metamorfosis, el de la historia entre la ninfa Galatea y el cíclope Polifemo. Este se halla enamorado de la ninfa, pero ella ama al pastor Acis. En el poema abundan las descripciones, que tienen más peso que la narración en sí misma. Asimismo, Góngora no persigue ningún propósito moralizante, como si hacían otros textos de este estilo.
San Juan de la Cruz
San Juan de la Cruz es el representante principal de la poesía mística, a la vez que una figura religiosa de máxima importancia dentro de España. Su vida transcurrió entre 1542 y 1591, por lo que no vivió tanto como otros autores esta corriente.Para este escritor la situación económica nunca fue fácil. Su familia era de origen hidalgo, pero se había empobrecido, lo que obligó a San Juan de la Cruz a trabajar desde temprana edad. Por suerte, eso no le impidió tener una excelente formación académica.
Se sabe que no publicó nada estando vivo y que, de hecho, no era muy prolífico. Con todo, lo poco que nos ha llegado de él ha sido suficiente para colocarlo entre los más grandes poetas de lengua hispana.
La producción literaria de San Juan se suele reducir a tres poemas, llamados comúnmente “poemas mayores”. Todos comparten un mismo eje temático, que es el ascenso del alma a Dios, además de ciertos rasgos autobiográficos del autor:
- Cántico espiritual: está considerado como el poema mayor más complejo. Está construido sobre la metáfora del Esposo y la Esposa, que representan respectivamente a Dios y al alma humana. De ese modo, el texto es una alegoría (representación metafórica) sobre la unión entre ambos elementos.
- Noche oscura: tiene una temática más relacionada con el amor, aunque también se puede entender como una metáfora. El protagonismo recae sobre una chica que busca verse con su amado, el cual es la representación de Dios. Por su parte, la joven representa el alma libre que busca unirse al Creador y alcanzar la realidad que los sentidos no le permiten conocer.
- Llama de amor viva: en este caso el tema sigue siendo la unión entre el Creador y su creación. Las imágenes y las metáforas abundan tanto como en los otros poemas, con la diferencia de que aquí se toma la llama como símbolo principal de cada uno de los protagonistas.
Ejemplos del Siglo de Oro
Ya te hemos explicado qué fue el Siglo de Oro y quienes fueron sus exponentes. Aquí te dejamos algunos fragmentos breves de las obras para que puedas apreciar su estilo y su esencia.
Acabáronse las vísperas y la fiesta de Santa Ana y quedó Preciosa algo cansada, pero tan celebrada de hermosa, de aguda y de discreta y de bailadora que a corrillos se hablaba della en toda la corte. De allí a quince días, volvió a Madrid con otras tres muchachas, con sonajas y con un baile nuevo, todas apercebidas de romances y de cantarcillos alegres, pero todos honestos; que no consentía Preciosa que las que fuesen en su compañía cantasen cantares descompuestos…
CIPIÓN: Mira, Berganza, nadie se ha de meter donde no le llaman, ni ha de querer usar del oficio que por ningún caso le toca. Y has de considerar que nunca el consejo del pobre, por bueno que sea, fue admitido ni el pobre humilde ha de tener presunción de aconsejar a los grandes y a los que piensan que se lo saben todo.
En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, vivía no hace mucho un hidalgo de los de lanza ya olvidada, escudo antiguo, rocín flaco y galgo corredor. Consumían tres partes de su hacienda una olla con algo más de vaca que carnero, ropa vieja casi todas las noches, huevos con torreznos los sábados, lentejas los viernes y algún palomino de añadidura los domingos.
PASCUALA.— Tienes, Laurencia, razón;
que en dejando de querer,
más ingratos suelen ser
que al villano el gorrión.
En el invierno, que el frío
tiene los campos helados,
descienden de los tejados,
diciéndole: “tío, tío”,
hasta llegar a comer
las migajas de la mesa;
mas luego que el frío cesa,
y el campo ven florecer,
no bajan diciendo “tío”,
del beneficio olvidados,
mas saltando en los tejados
dicen: “judío, judío”.
ROSAURA.— Hipogrifo violento,
que corriste parejas con el viento,
¿dónde rayo sin llama,
pájaro sin matiz, pez sin escama,
y bruto sin instinto
natural, al confuso laberinto
de esas desnudas peñas
te desbocas, te arrastras y despeñas?
Quédate en este monte,
donde tengan los brutos su Faetonte;
que yo, sin más camino
que el que me dan las leyes del destino,
ciega y desesperada,
bajaré la cabeza enmarañada
de este monte eminente
que arruga al sol el ceño de la frente.
Era del año la estación florida
en que el mentido robador de Europa
(media luna las armas de su frente,
y el Sol todos los rayos de su pelo),
luciente honor del cielo,
en campos de zafiro pace estrellas,
cuando el que ministrar podía la copa
a Júpiter mejor que el garzón de Ida,
náufrago, y desdeñado, sobre ausente,
lagrimosas de amor dulces querellas
da al mar; que condolido,
fue a las ondas, fue al viento
el mísero gemido,
segundo de Arïón dulce instrumento.
Cerrar podrá mis ojos la postrera
sombra que me llevare el blanco día;
y podrá desatar esta alma mía
hora a su afán ansioso lisonjera;
mas no de esa otra parte en la ribera
dejará la memoria, en donde ardía;
nadar sabe mi llama la agua fría,
y perder el respeto a ley severa.
Alma a quien todo un dios prisión ha sido,
venas que humor a tanto fuego han dado,
medulas, que han gloriosamente ardido…
OCTAVIO.— Mis hijas son entrambas; mas yo os juro
que me enfadan y cansan, cada una
por su camino, cuando más procuro
mostrar amor y inclinación a alguna.
Si ser Finea simple es caso duro,
ya lo suplen los bienes de Fortuna
y algunos que le dio Naturaleza,
siempre más liberal de la belleza;
pero ver tan discreta y arrogante
a Nise, más me pudre y martiriza,
y que de bien hablada y elegante
el vulgazo la aprueba y soleniza.
Pareciome, pues, que veía un mancebo que discurriendo por el aire daba voz de su aliento a una trompeta, afeando con su fuerza en parte su hermosura. Halló el son obediencia en los mármoles y oído en los muertos, y así al punto comenzó a moverse toda la tierra y a dar licencia a los huesos, que andaban ya unos en busca de otros…
CRESPO.— Dime por tu vida, ¿hay alguien
que no sepa que yo soy,
si bien de limpio linaje,
hombre llano? No, por cierto.
Pues, ¿qué gano yo en comprarle
una ejecutoria al Rey
si no le compro la sangre?
¿Dirán entonces que soy
mejor que ahora? No, es dislate.
Pues, ¿qué dirán? Que soy noble
por cinco o seis mil reales;
y esto es dinero y no es honra;
que honra no la compra nadie.
¿Quieres, aunque sea trivial
un ejemplillo escucharme?
Mientras Corinto, en lágrimas deshecho,
La sangre de su pecho vierte en vano,
Vende Lice a un decrépito indïano
Por cien escudos la mitad del lecho.
¿Quién, pues, se maravilla deste hecho,
Sabiendo que halla ya paso más llano,
La bolsa abierta, el rico pelicano,
Que el pelícano pobre, abierto el pecho?
Buscas en Roma a Roma, ¡oh peregrino!,
y en Roma misma a Roma no la hallas:
cadáver son la que ostentó medallas,
y tumba de sí propio el Aventino.
Yace donde reinaba el Palatino;
y limadas del tiempo, las medallas
más se muestran destrozo a las batallas
de las edades que blasón latino.
BELISARDA.— Hermosas luces del cielo,
que influís en los mortales
ya los bienes, ya los males
ya las mudanzas del suelo;
supuesto que vuestro celo
es seguir vuestro camino,
¿qué inclinación, qué destino,
es este, con que mi amor
ya conduciendo mi honor
al último desatino?
A qué más puede llegar
la fuerza de un pensamiento
que a no tener sentimiento
de morir, y porfiar?
GERARDA.— Los padres, Teodora, somos como las aves. En sabiendo volar el pájaro, ayúdele el aire y válgale el pico. Pero Dorotea, que no está fuera de vuestras alas, y que cada día vuelve a reconocer el nido, y que ha cinco años que este mozo la tiene perdida, sin alma, sin remedio, y tan pobre (por no darle disgusto, o por miedo que le ha cobrado), que ayer vendió un manteo a una amiga suya…
MARIENE.— Tetrarca generoso,
Mi dueño amante y mi galán esposo,
Ingrata al cielo fuera
Y a mi ventura ingrata, si rindiera
El sentimiento mío
A pequeño accidente su albedrío.
La pena que me aflige,
De causa ¡ay cielos! superior se rige,
Tanto, que es todo el cielo
Depósito infeliz de mi desvelo,
Pues todo el cielo escribe
Mi desdicha, que en él grabada vive
En papel de cristal con letras de oro.
No con causa menor mi muerte lloro.
DOÑA MENCÍA.— Desde la torre los vi
y, aunque quién son no podré
distinguir, Jacinta, sé
que una gran desdicha allí
ha sucedido. Venía
un bizarro caballero
en un bruto tan ligero
que en el viento parecía
un pájaro que volaba,
y es razón que lo presumas
porque un penacho de plumas
matices al aire daba.
Era el dueño y güésped de los que creen en Dios por cortesía o sobre falso; moriscos los llaman en el pueblo. Recibióme, pues, el güésped con peor cara que si yo fuera el Santísimo Sacramento. Ni sé si lo hizo porque le comenzásemos a tener respeto u por ser natural suyo dellos, que no es mucho que tenga mala condición quien no tiene buena ley. Pusimos nuestro hatillo, acomodamos las camas y lo demás y dormimos aquella noche.
Dirás que los deseos te arrastran; que ves la mujer hermosa y tienes concupiscencia; que ves el palacio sumptuoso y estás en el campo sin abrigo; que ves oro, perlas y riquezas y andas desnudo; que ves a los otros en oficios y dignidades, estimados y respetados, mandando el mundo, y que te ves despreciado y abatido y sin que hagan caso de ti; y dices que no puedes dejar de desear la comodidad que el otro tiene, para ti, que te debes más amor.
La ciudad de Babilonia
—famosa, no por sus muros—
(fuesen de tierra cocidos
o sean de tierra crudos),
sino por los dos amantes,
desdichados hijos suyos,
que, muertos, y en un estoque,
han peregrinado el mundo—
citarista dulce, hija
del Archipoeta rubio,
si al brazo de mi instrumento
le solicitas el pulso,
digno sujeto será
de las orejas del vulgo…
De este, pues, formidable de la tierra
Bostezo, el melancólico vacío
A Polifemo, horror de aquella sierra,
Bárbara choza es, albergue umbrío
Y redil espacioso donde encierra
Cuanto las cumbres ásperas cabrío,
De los montes esconde: copia bella
Que un silbo junta y un peñasco sella.
(La Esposa)
¿Adónde te escondiste,
Amado, y me dejaste con gemido?
Como el ciervo huiste,
habiéndome herido;
salí tras ti clamando, y eras ido.
Pastores, los que fuerdes
allá por las majadas al otero,
si por ventura vierdes
aquel que yo más quiero,
decilde que adolezco, peno y muero.
Buscando mis amores
iré por esos montes y riberas;
ni cogeré las flores
ni temeré las fieras;
y pasaré los fuertes y fronteras.
En una noche oscura,
con ansias en amores inflamada
¡oh dichosa ventura!
salí sin ser notada,
estando ya mi casa sosegada.
A oscuras y segura,
por la secreta escala, disfrazada,
¡oh dichosa ventura!
a oscuras y en celada,
estando ya mi casa sosegada.
En la noche dichosa,
en secreto, que nadie me veía,
ni yo miraba cosa,
sin otra luz y guía
sino la que en el corazón ardía.
¡Oh llama de amor viva,
que tiernamente hieres
de mi alma en el más profundo centro!
pues ya no eres esquiva,
acaba ya si quieres;
rompe la tela de este dulce encuentro.
¡Oh cauterio suave!
¡Oh regalada llaga!
¡Oh mano blanda! ¡Oh toque delicado,
que a vida eterna sabe
y toda deuda paga!,
matando muerte en vida la has trocado.
Ejercicios del Siglo de Oro
En este punto del artículo, lo único que falta es que demuestres que has comprendido bien cada uno de los apartados anteriores. Y no hay mejor forma de hacerlo que resolviendo unos ejercicios sencillos.
Todos los que te mostramos a continuación son de selección múltiple. Deberás elegir la opción que completa correctamente el enunciado o párrafo, así que ten en cuenta el contexto de cada ejercicio y lo que has visto hasta aquí.
Tan pronto como hayas concluido, ve a la sección “Respuestas”. Allí encontrarás los ejercicios ya resueltos y podrás comprobar tú mismo cómo te fue.
N.º | Ejercicios | Opciones |
---|---|---|
1 | El inicio del Siglo de Oro, de acuerdo con los estudiosos, se ha fijado en el año ______. El argumento para tomarlo es que fue entonces cuando se publicó la Gramática castellana de Antonio de Nebrija. | a)1495, b)1616, c)1492 |
2 | A lo largo del Siglo de Oro, el género que más auge tuvo fue ________, de modo que la mayor parte de la producción literaria de dicha época está compuesta por dramas y comedias. | a)el teatro, b)la novela, c)el ensayo |
3 | Según la crítica especializada, _____________ es el escritor más valioso que surgió del Siglo de Oro, ya que creó la novela más traducida y valiosa de todo el idioma español. | a)Lope de Vega, b)Miguel De Cervantes, c)Francisco de Quevedo |
4 | Los movimientos principales que se desarrollaron en la literatura del Siglo de Oro fueron el conceptismo y el _________, y son considerados como estilos opuestos entre sí. | a)culteranismo, b)modernismo, c)vanguardismo |
5 | La obra más exitosa de Calderón de la Barca es ______________. En ella explora temas tan complejos como la oposición al destino y la voluntad personal. | a)“Fuenteovejuna”, b)“La vida es sueño”, c)“Don Quijote de la Mancha” |
6 | Una de las fuentes de inspiración primordiales de los escritores del Siglo de Oro era _________. En consecuencia, fueron en contra de sus predecesores, quienes dudaban de que sirviera como un tema útil para la literatura. | a)la historia, b)la cotidianidad, c)la filosofía |
7 | Durante el Siglo de Oro, el verso _________ la fama que había tenido en la Antigüedad, así que estaba presente en la mayoría de textos literarios. | a)recuperó, b)perdió, c)amplificó |
8 | Dentro de los lineamientos del conceptismo, ___________ es lo más importante, lo cual se refleja en los múltiples poemas pertenecientes a este movimiento literario. | a)la forma, b)el realismo, c)el fondo |
9 | Para los autores del Siglo de Oro, era fundamental establecer modelos literarios ____________. Esta forma de pensar los hizo resaltar frente a los escritores renacentistas de Europa. | a)renovados, b)propios, c)clásicos |
10 | A diferencia de otras naciones europeas, España _________ la religión católica. Eso explica por qué hay tantas obras del Siglo de Oro que buscan reforzar los valores cristianos. | a)mantuvo, b)reformó, c)abandonó |
11 | El ____________ figura entre los temas más particulares de esta corriente literaria. A varios autores les interesaba explorar el problema de la realidad, por lo que recurrían a recursos como el sueño para abordarlo. | a)simbolismo, b)historicismo, c)existencialismo |
12 | La novela ___________ se centra en un personaje que posee una astucia notable y que pertenece a la clase baja de la sociedad. A través de su inteligencia y malicia busca sobrevivir en un mundo que no lo favorece. | a)caballeresca, b)satírica, c)picaresca |
13 | En las “Novelas ejemplares”, se puede apreciar cierta influencia de la narrativa _______________, pero no llega a opacar la originalidad de Cervantes. | a)italiana, b)francesa, c)alemana |
14 | El rasgo más resaltante de “La Dorotea” es que se desarrolla mediante ____________. Esta característica hace que sea un texto narrativo muy difícil de clasificar. | a)recuerdos, b)descripciones, c)diálogos |
15 | Además de la poesía, Quevedo llegó a componer narraciones y ___________. Estos últimos los aprovechó para plantear muchas de sus reflexiones más profundas. | a)ensayos filosóficos, b)análisis literarios, c)comentarios teológicos |
16 | _________ era para Calderón de la Barca un elemento especialmente importante, debido a que influía mucho sobre la escenificación y sobre el impacto de esta en los espectadores. | a)La música, b)La escenografía, c)El realismo |
17 | La poesía __________ se centraba en la unión del ser humano con Dios. Así pues, se trata de una literatura más enfocada en el plano espiritual que en el terrenal y que busca ir más allá de lo que logran captar los sentidos. | a)mística, b)cómica, c)amorosa |
18 | El honor, otro de los temas frecuentes de la literatura del Siglo de Oro, era enfocado siempre desde una visión __________. Este enfoque permitía realzar la importancia de defender la honra y el respeto de un apellido. | a)monárquica, b)familiar, c)personal |
19 | El texto más representativo de Góngora es ______________. Esta obra, que actualmente es considerada una joya de la literatura española, fue acusada en su momento de pretenciosa y supuso muchos ataques hacia el autor por parte de otros escritores famosos. | a)“Fábula de Polifemo y Galatea”, b) “Fábula de Píramo y Tisbe”, c)“Soledades” |
20 | __________________ es considerado el mayor exponente de la poesía de tipo místico. No es una sorpresa que fuera así, dado que contaba con una amplia formación religiosa, por lo que conocía bastante bien la cultura cristiana. | a)San Juan de la Cruz, b)Francisco de Quevedo, c)Lope de Vega |
Respuestas
N.º | Ejercicios |
---|---|
1 | El inicio del Siglo de Oro, de acuerdo con los estudiosos, se ha fijado en el año 1492. El argumento para tomarlo es que fue entonces cuando se publicó la Gramática castellana de Antonio de Nebrija. |
2 | A lo largo del Siglo de Oro, el género que más auge tuvo fue el teatro, de modo que la mayor parte de la producción literaria de dicha época está compuesta por dramas y comedias. |
3 | Según la crítica especializada, Miguel de Cervantes es el escritor más valioso que surgió del Siglo de Oro, ya que creó la novela más traducida y valiosa de todo el idioma español. |
4 | Los movimientos principales que se desarrollaron en la literatura del Siglo de Oro fueron el conceptismo y el culteranismo, y son considerados como estilos opuestos entre sí. |
5 | La obra más exitosa de Calderón de la Barca es “La vida es sueño”. En ella explora temas tan complejos como la oposición al destino y la voluntad personal. |
6 | Una de las fuentes de inspiración primordiales de los escritores del Siglo de Oro era la cotidianidad. En consecuencia, fueron en contra de sus predecesores, quienes dudaban de que sirviera como un tema útil para la literatura. |
7 | Durante el Siglo de Oro, el verso recuperó la fama que había tenido en la Antigüedad, así que estaba presente en la mayoría de textos literarios. |
8 | Dentro de los lineamientos del conceptismo, el fondo es lo más importante, lo cual se refleja en los múltiples poemas pertenecientes a este movimiento literario. |
9 | Para los autores del Siglo de Oro, era fundamental establecer modelos literarios propios. Esta forma de pensar los hizo resaltar frente a los escritores renacentistas de Europa. |
10 | A diferencia de otras naciones europeas, España mantuvo la religión católica. Eso explica por qué hay tantas obras del Siglo de Oro que buscan reforzar los valores cristianos. |
11 | El existencialismo figura entre los temas más particulares de esta corriente literaria. A varios autores les interesaba explorar el problema de la realidad, por lo que recurrían a recursos como el sueño para abordarlo. |
12 | La novela picaresca se centra en un personaje que posee una astucia notable y que pertenece a la clase baja de la sociedad. A través de su inteligencia y malicia busca sobrevivir en un mundo que no lo favorece. |
13 | En las “Novelas ejemplares”, se puede apreciar cierta influencia de la narrativa italiana, pero no llega a opacar la originalidad de Cervantes. |
14 | El rasgo más resaltante de “La Dorotea” es que se desarrolla mediante diálogos. Esta característica hace que sea un texto narrativo muy difícil de clasificar. |
15 | Además de la poesía, Quevedo llegó a componer narraciones y ensayos filosóficos. Estos últimos los aprovechó para plantear muchas de sus reflexiones más profundas. |
16 | La escenografía era para Calderón de la Barca un elemento especialmente importante, debido a que influía mucho sobre la escenificación y sobre el impacto de esta en los espectadores. |
17 | La poesía mística se centraba en la unión del ser humano con Dios. Así pues, se trata de una literatura más enfocada en el plano espiritual que en el terrenal y que busca ir más allá de lo que logran captar los sentidos. |
18 | El honor, otro de los temas frecuentes de la literatura del Siglo de Oro, era enfocado siempre desde una visión familiar. Este enfoque permitía realzar la importancia de defender la honra y el respeto de un apellido. |
19 | El texto más representativo de Góngora es “Soledades”. Esta obra, que actualmente es considerada una joya de la literatura española, fue acusada en su momento de pretenciosa y supuso muchos ataques hacia el autor por parte de otros escritores famosos. |
20 | San Juan de la Cruz es considerado el mayor exponente de la poesía de tipo místico. No es una sorpresa que fuera así, dado que contaba con una amplia formación religiosa, por lo que conocía bastante bien la cultura cristiana. |
Terminamos de esa forma con nuestra clase acerca del Siglo de Oro. A estas alturas ya eres un conocedor de esta corriente literaria tan importante. Te invitamos a leer alguna de las obras que te mostramos hoy y, en caso de que te queden dudas, a darle otro vistazo al post.